miércoles, abril 18, 2007

Polonia paranoica

Las llaman "leyes de lustración". Es decir, de purificación ritual, según el diccionario. Lo cual, en este país donde el catolicismo está clavado a la historia, no deja de tener una profunda significación de arrepentimiento y penitencia. En virtud de esta ley votada en octubre de 2006 y que entró en vigor el pasado 15 de marzo, setecientos mil polacos tendrán que confesar si colaboraron con los comunistas de 1945 a 1989. Todos los altos funcionarios, profesores, abogados, directores de escuela y periodistas nacidos antes de agosto de 1972 tienen tiempo hasta el 15 de mayo para confesar su pecado.

Todos tienen que llenar un formulario y contestar a la pregunta: "¿Colaboró usted en secreto y conscientemente con los antiguos servicios de seguridad comunistas?". Tendrán que entregarlo a su superior jerárquico que lo dirigirá al Instituto de la Memoria en Varsovia. Este Instituto verificará en sus archivos y entregará un certificado de "limpieza política". En caso de que se pruebe la colaboración, los periodistas que trabajen en servicios públicos serán automáticamente despedidos. Quienes se nieguen a responder, o de quienes se pruebe que mintieron, se arriesgan a una pena de prohibición de ejercer su profesión durante diez años.

Ver artículo completo en Le Monde Diplomatique.

1 comentario:

Teresita Rincón García dijo...

Esperemos que en México no llegue a darse este tipo de "cacería", pues el catolicismo también "está clavado a nuestra historia".Por lo pronto ahí está el debate de la inminente aprobación de la quinta causal para despenalizar el aborto. Por adelantado la iglesia católica y el gobierno de derecha hacen sus declaraciones condenatorias contra los legisladores que están a favor.

Me pregunto ¿qué piensa hacer el gobierno Polaco con aquellos que confiesen con un "SI"?