Por P. RUSIÑOL - Madrid - (El País.com, 30/05/2008)
El Banco Mundial prepara un plan de choque de 1.200 millones de dólares (alrededor de 770 millones de euros) para reforzar la agricultura en los países más afectados por la subida de precios y con menos recursos. Así lo aseguró su presidente, Robert Zoellick, que participó en una conferencia internacional en Japón sobre el desarrollo de África.
"Es necesario centrarse en acciones específicas. Con estas iniciativas esperamos ayudar a superar el peligro inmediato de hambre y malnutrición para los 2.000 millones de personas que luchan por sobrevivir ante el aumento del precio de los alimentos", afirmó Zoellick en una videoconferencia retransmitida por Internet. El Banco Mundial lleva semanas advirtiendo de que la situación exige medidas "urgentes". Ha señalado a 40 países en riesgo de desestabilización por culpa del alza de precios y avisó de que la crisis generará 100 millones de nuevos pobres de un plumazo.
El plan anunciado por Zoellick incluye préstamos inmediatos a Yibuti (cinco millones de dólares), Haití (10 millones) y Liberia (10 millones). Haití es el único país en el que la revuelta del hambre se ha cobrado una cabeza política: la del primer ministro Jacques Edouard Alexis. Pero ha habido manifestaciones y disturbios por el aumento del precio de los alimentos en una veintena de países, sobre todo en África y Asia. Está previsto que el próximo mes se aprueben créditos similares a Togo, Yemen y Tayikistán, también en la lista de los países más afectados por la crisis, según las instituciones internacionales. Los nuevos fondos vinculados a la agricultura del Tercer Mundo que van a inyectarse -en dinero en mano, en formación, en fertilizantes y semillas, en sistemas de irrigación, etcétera- incrementarán en más del 30% los ya destinados en 2007 para estos fines por la institución.
Esto supone un cambio de tendencia: los recursos para la agricultura disminuían año tras año en las últimas décadas, como recordaba ayer la ONG Intermón Oxfam, que subraya que la "ayuda global al sector se ha reducido en dos terceras partes si se compara con las cifras de 1985".
Intermón Oxfam desconfía del plan del Banco Mundial, y se mostraba ayer muy crítica con la actuación de la institución, a la que responsabiliza en parte de los problemas que atraviesan los países pobres por el aumento del precio de los alimentos: "El Banco Mundial ha insistido durante años en que, como condición para recibir ayuda, los países pobres tenían que liberalizar sus sectores agrícolas y luego cobrarían el dinero", asegura Antonio Hernández, portavoz de la ONG para agricultura. Y añade: "Esto dejó a millones de campesinos pobres sin ayuda para hacer frente a los mercados, distorsionados a favor de los países ricos".
La plataforma Derecho a la Alimentación sostiene que el alza de precios es consecuencia "de unas políticas agrícolas centradas en el comercio, en lugar de en la alimentación humana". "Los alimentos se han convertido simplemente en productos con los que especular en los mercados", concluye.
El Banco Mundial prepara un plan de choque de 1.200 millones de dólares (alrededor de 770 millones de euros) para reforzar la agricultura en los países más afectados por la subida de precios y con menos recursos. Así lo aseguró su presidente, Robert Zoellick, que participó en una conferencia internacional en Japón sobre el desarrollo de África.
"Es necesario centrarse en acciones específicas. Con estas iniciativas esperamos ayudar a superar el peligro inmediato de hambre y malnutrición para los 2.000 millones de personas que luchan por sobrevivir ante el aumento del precio de los alimentos", afirmó Zoellick en una videoconferencia retransmitida por Internet. El Banco Mundial lleva semanas advirtiendo de que la situación exige medidas "urgentes". Ha señalado a 40 países en riesgo de desestabilización por culpa del alza de precios y avisó de que la crisis generará 100 millones de nuevos pobres de un plumazo.
El plan anunciado por Zoellick incluye préstamos inmediatos a Yibuti (cinco millones de dólares), Haití (10 millones) y Liberia (10 millones). Haití es el único país en el que la revuelta del hambre se ha cobrado una cabeza política: la del primer ministro Jacques Edouard Alexis. Pero ha habido manifestaciones y disturbios por el aumento del precio de los alimentos en una veintena de países, sobre todo en África y Asia. Está previsto que el próximo mes se aprueben créditos similares a Togo, Yemen y Tayikistán, también en la lista de los países más afectados por la crisis, según las instituciones internacionales. Los nuevos fondos vinculados a la agricultura del Tercer Mundo que van a inyectarse -en dinero en mano, en formación, en fertilizantes y semillas, en sistemas de irrigación, etcétera- incrementarán en más del 30% los ya destinados en 2007 para estos fines por la institución.
Esto supone un cambio de tendencia: los recursos para la agricultura disminuían año tras año en las últimas décadas, como recordaba ayer la ONG Intermón Oxfam, que subraya que la "ayuda global al sector se ha reducido en dos terceras partes si se compara con las cifras de 1985".
Intermón Oxfam desconfía del plan del Banco Mundial, y se mostraba ayer muy crítica con la actuación de la institución, a la que responsabiliza en parte de los problemas que atraviesan los países pobres por el aumento del precio de los alimentos: "El Banco Mundial ha insistido durante años en que, como condición para recibir ayuda, los países pobres tenían que liberalizar sus sectores agrícolas y luego cobrarían el dinero", asegura Antonio Hernández, portavoz de la ONG para agricultura. Y añade: "Esto dejó a millones de campesinos pobres sin ayuda para hacer frente a los mercados, distorsionados a favor de los países ricos".
La plataforma Derecho a la Alimentación sostiene que el alza de precios es consecuencia "de unas políticas agrícolas centradas en el comercio, en lugar de en la alimentación humana". "Los alimentos se han convertido simplemente en productos con los que especular en los mercados", concluye.
1 comentario:
Aprendi mucho
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